Basta con ver la sonrisa de Nick Anderson para darse cuenta de lo divertido y simpático que es este joven. Ya sea hablando de sus negocios -tiene dos-, de su amor por la naturaleza, de su afinidad por los animales o de su obsesión por la pizza, Nick es una delicia. También es un adulto que vive con autismo.

El viaje de Nick con Jay Nolan Community Services comenzó a la edad de 11 años cuando empezó a asistir al programa de los sábados de JNCS. Allí aprendió a utilizar el transporte público, a relacionarse con los miembros de la comunidad y a probar cosas nuevas y diferentes. Más tarde, cuando era adolescente, volvió a ampliar sus horizontes pasando dos veranos en el campamento de verano de la JNCS.

Sin embargo, no fue hasta 2007, tras graduarse en el instituto, cuando Nick experimentó sus éxitos más espectaculares. Como parte de su plan de apoyo, JNCS ha ayudado a Nick a poner en marcha dos empresas: una de paseo de perros y otra de máquinas expendedoras. El personal de apoyo de Nick le mantiene organizado y le enseña los aspectos básicos del negocio (por ejemplo, cómo llevar la facturación, el almacenamiento, la atención al cliente, etc.). Todos los días, después de pasear a sus cinco amigos caninos, Nick vuelve a casa para escribir a mano las facturas de sus clientes. Una vez a la semana, él y un miembro del personal de apoyo pasan por su máquina expendedora de refrescos en el JNCS para recoger el cambio y comprobar las existencias.

Nick comparte su casa de Northridge con Evan, uno de sus antiguos ayudantes individuales, y su mujer, Nadia. Desde que se trasladó a la vida asistida, Nick está más abierto al cambio… a probar cosas nuevas. Ahora hace ejercicio en un gimnasio, y le encanta hacer senderismo, montar en bicicleta y hacer casi cualquier cosa física. Sin embargo, su afinidad por la pizza no ha disminuido. Si pudiera, lo comería para desayunar, comer y cenar. Uno de sus lugares favoritos es Marcelino’s Italian Kitchen. Marcelino se ha convertido en un amigo de la familia y deja que Nick se ponga detrás del mostrador para preparar su pizza favorita, con albóndigas, cebollas y champiñones.

Nick está lleno de ganas de viajar y, gracias a la JNCS, ahora coge el autobús para ir a todas partes. Por encima de todo, le gusta estar rodeado de otras personas, y su familia, amigos y personal de apoyo le proporcionan precisamente eso.